Según Bill Aulet, autor del libro “la disciplina de emprender”, cuando una persona decide emprender suele ser porque a) tiene una idea que puede mejorar el mundo, b) tiene una tecnología nueva que quiere lanzar, c) porque tiene una pasión por alguna temática y decide lanzarse a por ello.

Sin embargo, existen muchas personas con espíritu emprendedor que no encajan en ninguna de las tres categorías anterior. Personas que quieren introducirse en el mundo empresarial y de los negocios, pero no encuentran la idea adecuada para dar comienzo a su nueva andadura.

En este artículo explicamos:

• Por qué es importante dedicar esfuerzos para dar con una buena idea de negocio
• Herramientas útiles para dar con una buena idea de negocio

¿Por qué la idea de negocio es importante para una emprendedor?

La idea de negocio es fundamental para un emprendedor porque constituye la base sobre la cual se construye toda la empresa. Una idea sólida y bien concebida permite identificar y aprovechar oportunidades en el mercado, resolviendo problemas reales o satisfaciendo necesidades específicas de los consumidores. Esto no solo asegura que el producto o servicio tenga demanda, sino que también facilita la diferenciación de la competencia, proporcionando una ventaja competitiva sostenible.

La idea de negocio también es esencial para atraer inversores y asegurar el financiamiento. Los inversores buscan proyectos innovadores y viables con un alto potencial de retorno sobre la inversión. Una idea de negocio bien articulada y respaldada por una sólida investigación de mercado (hablaremos sobre esto en otro artículo más adelante) puede inspirar confianza y demostrar que el emprendedor ha identificado una oportunidad realista y tiene un plan claro para capitalizarla.

Adicionalmente, la idea de negocio es el punto de partida para la creación de un modelo de negocio eficiente. La idea de negocio va a delimitar el tipo de modelo de negocio que se puede llevar a cabo y tiene que ir en sintonía con las inquietudes del emprendedor que bien explicábamos en el post anterior “Conocerse a si mismo: primera tarea de un emprendedor”.

Por último, la idea de negocio tiene que estar relacionada con un producto o servicio que atraiga o pueda gustarle a un emprendedor. Crear un negocio desde cero requiere dedicar muchas horas al día y momentos difíciles que son necesarios sobrepasar para poder seguir adelante, por lo que es importante mostrar simpatía con la idea de negocio si no se quiere abandonar el proyecto cuando aparezcan los primeros obstáculos.

Sabemos que, cuando no perteneces a una de las tres categorías definidas por Bill Aulet, no es fácil dar con una idea de negocio que tenga en cuenta los puntos comentados. Por eso, vamos a compartir algunas herramientas que te van a ayudar a despertar tu perfil innovador y analítico para dar con buenas ideas de negocio.

Es importante partir de la base y tener en consideración que para poder dar con ideas de negocio es importante realizar un ejercicio de identificación de “pains”, puntos de dolor o problemas que existan en la sociedad para utilizarlos como punto de partida de cara a la generación de ideas de negocio.

Herramientas útiles para dar con una buena idea de negocio

1. Método SCAMPER
2. Matriz de Valoración de ideas

Método SCAMPER

Creado en 1971 por Bob Eberlee, el método SCAMPER es una de las técnicas más potentes para la generación de ideas de negocio innovadoras buscando la mejora de productos, servicios o procesos.

SCAMPER es el acrónimo de: Sustituir, Combinar, Adaptar, Modificar, Posibilidades, Eliminar, Reordenar.

Partiendo de un problema identificado, se trata de cuestionar cada uno de estos conceptos a dicho problema:

• Sustituir: ¿Qué se puede sustituir sobre el producto para dar solución al problema?
• Combinar: ¿Se puede combinar con varios conceptos, ideas, etc.?
• Adaptar: ¿Se puede adaptar algo sobre otras ideas, culturas, sabores, etc.?
• Modificar: ¿Se puede modificar algo sobre el producto que aporte valor añadido?
• Posibilidades: ¿Tienes posibilidades para utilizarlo de otra manera, para otros usos, etc.?
• Eliminar: ¿Se le puede eliminar algo que permita dar solución al problema?
• Reordenar: ¿Se pueden cambiar elementos de lugar que den solución al problema?

El objetivo es lanzar el mayor numero posible de ideas para cada una de las variables del método SCAMPER (lluvia de ideas) aunque muchas de ellas carezcan de sentido o viabilidad. Se trata de dar rienda suelta a la imaginación de una manera estructurada.

Una vez realizado el ejercicio se debe realizar una segunda revisión de todas las ideas obtenidas para cada variable y hacer una criba de todas aquellas ideas que carezcan de sentido desde el punto de vista de negocio o de interés personal, quedando de esta manera una lista de ideas más acotada. Sobre este listado, se realiza un ejercicio de análisis más profundo que sirva para ir cerrando el embudo de oportunidades y la posible elección de una idea de negocio. Para realizar este análisis utilizaremos la Matriz de Valoración de ideas.

Matriz de Valoración de Ideas

La matriz de valoración de ideas es una herramienta que permite comparar diferentes ideas de negocio contra una serie de variables a las cuales se les asigna un nivel de ponderación cuya sumatoria es igual a la unidad. Aquella idea o ideas con mayor puntuación al final del ejercicio son las adecuadas para plantear llevarlas a ejecución.

Para entenderlo, lo vamos a ver con un ejemplo práctico, pero antes vamos a dejar claras algunas premisas:

1. Las variables de la matriz de decisión son de libre elección por parte del emprendedor
2. Se pueden establecer cuantas variables se considere
3. La ponderación total de la suma de variables debe ser igual al 100%

Suponemos que las variables de decisión elegidas son las siguientes:

1. Tiempo necesario para lanzarla al mercado
2. Facilidad para encontrar proveedores
3. Facilidad de réplica por la competencia
4. Nivel de inversión
5. Nivel de innovación
6. Rentabilidad
7. Barreras regulatorias
8. Tamaño del mercado
9. Posibilidades de amplitud del producto/servicio

Para cada una de las variables, le asignamos una ponderación en función de nuestra perspectiva personal.

1. Tiempo necesario para lanzarla al mercado  5%
2. Facilidad para encontrar proveedores  15%
3. Facilidad de réplica por la competencia  5%
4. Nivel de inversión  15%
5. Nivel de innovación  5%
6. Rentabilidad  20%
7. Barreras regulatorias  10%
8. Tamaño del mercado 10%
9. Posibilidades de amplitud del producto/servicio 10%

Para cada una de las ideas de negocio que estamos analizando, las clasificamos del 1 al 10 para cada una de las variables:

Por último, aplicamos el % de ponderación de cada variable a cada evaluación numérica de cada una de las ideas:

Una vez calculada la calificación final, se realiza una sumatoria de todas ellas para cada una de las ideas. Aquella idea con mayor puntuación es la idea que mas se acerca a cumplir los estándares (variables) marcados y priorizados.

Espero que este ejercicio sirva a la hora de evaluar idea de negocio y tener algo más de claridad sobre que ideas son las más aconsejables ejecutar.

Gracias por estar aquí!